Lunes 22 de agosto de 2011 La opinión
Los terrenos de Zinsa se convierten en el paraíso de saqueadores de chatarra
Los vecinos denuncian que hay desvalijadores que entran en el solar, arrancan piezas de metal contaminadas y las limpian en las calles del barrio
JESÚS VIARTOLA No están dejando ni las vallas. Los saqueadores de chatarra han encontrado en los terrenos de la antigua Española del Zinc (Zinsa), en Torreciega, una auténtica mina de oro de la que se llevan todo aquello que aún pueda ser de valor, como cobre de instalaciones eléctricas y restos de metal, denuncian los vecinos, que temen que las sustancias tóxicas que aún quedan en la zona (todavía no se ha abordado la descontaminación de los terrenos) lleguen a las calles del barrio.
«Hay personas que se llevan trozos de metal de los terrenos y los limpian frotándolos con un cepillo en medio de la calle. El polvillo que sueltan es muy contaminante porque ha estado expuesto a los metales y sustancias químicas con las que se trabajaba en Zinsa», explicó Alejandro Franco, portavoz de la Asociación de Vecinos de Torreciega.
Litigio abierto
Los terrenos pertenecen a la empresa Quorum Capital Partners, que se los compró a Zinsa con la esperanza de que se recalificaran para poder construir una urbanización de lujo. El Ayuntamiento aceptó la operación siempre y cuando las plusvalías que recibiese Zinsa revirtiesen en los trabajadores, pero no ha sido así, Ambas empresas están litigando todavía precisamente a causa del pago de los terrenos. El solar que ocupaba la antigua fábrica cuenta con alguna vigilancia, «pero el perímetro es tan grande que siempre se cuela alguien», señalaron vecinos del barrio.
El portavoz vecinal aseguró que incluso se llegó a llamar a la Policía para informarles de lo que estaba ocurriendo, «pero al tratarse de una propiedad privada, nos dijeron que no podían hacer nada para evitar que entrase la gente, que para ello era necesario que los propietarios presentaran una denuncia». Los expoliadores han llegado a meter en los terrenos «vehículos para llevarse forjados, hierro y zinc. Además, tienen libre acceso a las balsas de jarosita (mineral residual del que se extrae zinc), con el riesgo que supone», según Alejandro Franco.
Por su parte, el portavoz de los extrabajadores de Española del Zinc, Luis Gutiérrez, confirmó que los expoliadores se están llevando todo lo que pueden de las viejas instalaciones. «Incluso se han llevado pieza por pieza un transformador que valía un millón y medio de euros. Si la empresa se hubiese encargado de vender ella misma todo ese material, tal y como se le planteó en su momento, ahora tendría dinero para pagarnos lo que nos debe», apuntó.
Precisamente hace un año se declaró un incendio en los terrenos de Española del Zinc que afectó a dos balsas de lavado de mineral y a una escombrera. Su origen pudo estar en que una de las personas que entró en los terrenos para llevarse material quemase cable de cobre para quitarle el plástico y que el fuego se le fuese de las manos.
Propiedad privada
Por su parte, el portavoz del Gobierno municipal, Francisco Espejo, confirmó que poco se puede hacer en la zona al tratarse de una propiedad privada. No obstante, recordó que tras el incendio ocurrido hace un año en los terrenos, «se obligó a la empresa a vallar el perímetro, a que tapase las balsas, que no deberían haber estado descubiertas, y a que tomase otras medidas para evitar más episodios de este tipo».
Esta redacción intentó contactar con algún representante de Quorum, actual propietaria de los terrenos, para conocer qué medidas de seguridad se han adoptado en la zona, pero no fue posible.
Sustancias inocuas mientras no se toquen
La Comunidad ya multó a Española del Zinc con 660.000 euros por dejar residuos peligrosos.
J. V. Los restos de minerales y sustancias químicas que aún se pueden encontrar en los antiguos terrenos de Española del Zinc no revisten peligro alguno para la población de Torreciega mientras no se toquen. Así lo explicó en su día, tras el incendio de hace un año, el entonces director general de Calidad Ambiental y actual portavoz del Gobierno municipal, Francisco Espejo, que recordó que se le abrieron a la empresa dos expedientes sancionadores que recogían multas por valor de 660.00 euros.
La Comunidad envió hasta el solar a sus técnicos, que estuvieron extrayendo muestras del terreno para analizarlas, tras lo que concluyeron que quedaban residuos tóxicos y peligrosos en toda la zona.
En opinión de Francisco Espejo, Zinsa debería de haber descontaminado los terrenos tras la demolición de la fábrica. motivo por el que se le impusieron las sanciones.
La actual propietaria de los terrenos, Quorum Capital Partners, que aún mantiene un litigio con Zinsa por el pago de los mismos, no podría construir en la zona mientras no se descontaminase el solar, aunque habrá que determinar a quién corresponde hacerlo una vez haya una resolución judicial sobre el asunto.
Española del Zinc está actualmente en proceso de liquidación y se espera que el mismo concluya durante el próximo mes de septiembre. El cierre de la fábrica dejó en la calle a 240 trabajadores a los que se les adeudan seis millones de euros.
